Con referencia a la composición gráfica podemos decir que se trata de varios elementos textuales y gráficos en el cual trabajan colectivamente con el fin de trasferir algún dato, un mensaje, a todo espectador o usuario final.
Dentro de esta labor en equipo, todo contenido gráfico no sólo debe brindar semblantes visuales y artísticos, ya que su aspecto, todas las formas y colores, deben influir de manera profunda en esos datos suministrados por esos elementos textuales, vigorizando su poder culminante en el espectador.
Cualquier imagen seleccionada y puesta adecuadamente dentro del documento centraliza esa atención en el lector y le agrega algún significado al mismo. Esas imágenes el cual se muestran en una enorme diversidad de conveniencias: ya sean ilustraciones, retratos, dibujos, iconos, etc, todas ellas poseen una sola personalidad y especialidad, y sin embargo, todas ellas poseen un punto en común: Son digital.
Se quedó atrás ese tiempo en donde dichas composiciones gráficas solían ser un resumen de procedimientos propios y separados, el cual todo impresor debía de montar con la totalidad del arte que poseía para elaborar alguna entidad magnífica. Con respecto a esos equipos actuales informáticos y esas aplicaciones de autoedición, diseño gráfico, diseño industrial y diseño web hicieron viable la disminución de todos esos elementos colaboradores dentro de alguna composición cualquiera a continuaciones de dígitos binarios el cuan de manera sencilla encajan entre sí.
Al momento de laborar con esos elementos gráficos, lo primero sería paso juntar todo lo que se requiere para una composición, logrando emplear distintas fuentes y métodos para eso: Un escaneado de los archivos, ilustraciones o fotografías en papel, elaboración de manera directa a través de programas de diseño gráfico, dibujo digital por medio de tabletas digitalizadoras, producción de fotografías con cámaras digitales, utilizar algunos gráficos y fotografías ya existentes, gratuitas o no, etc.
Usualmente, esas primeras versiones de los componentes gráficos no lograrán adaptarse a vuestras necesidades a todo dar, por ello es necesario un posterior trabajo utilizando programas de retoque de imágenes con el fin de obtener varias de esas peculiaridades finales tan solicitadas.
Mientras se vayan consiguiendo las versiones terminales de esas imágenes se requerirá designarles un nombre y guardarlas por medio de un sistema el cual haga viable un control eficaz de esas mismas y de todos los originales, de manera que se puedan localizar y tener accesible en todo instante.
Por concluyente, se tiene que montar dentro de alguna composición la totalidad de esos elementos gráficos y textuales, empleando usualmente para eso un programa de autoedición, diseño gráfico o diseño web.